miércoles, 11 de febrero de 2015

DORMIDOS

Dormidos, sí dormidos.
Todos estamos dormidos, no nos damos cuenta de lo que pasa hasta que ya es imposible no verlo, que si hubiera sido un león, nos habría comido hace tiempo; estamos tan dormidos que muchas veces no nos damos cuenta ni de lo que nos pasa a nosotros mismos, hasta que un día, pasa algo que nos hace despertar y entonces, nos damos cuenta de lo dormidos que estábamos.
Estábamos tan dormidos que no nos dimos cuenta de lo que estaba pasando en los países tercer mundistas, hasta que no nos empezó a afectar de verdad,  entonces ya nos despertamos, pero como siempre, era demasiado tarde.

Estamos tan dormidos que no nos fijamos en el resto de personas, y solo despertamos cuando pasa algo verdaderamente grave, pero claro, ya es tarde.
Estamos tan dormidos que no nos damos cuenta de que queremos a alguien hasta que ya no está,  entonces despertamos, y recordamos lo importante que era esa persona y lo poco que se lo hemos dicho, pero vuelve a ser demasiado tarde.
Las nuevas tecnologías nos cantan nanas, nos leen cuentos y nos arropan, hacen todo lo posible para que nos durmamos, pero tenemos que saber despertarnos, tenemos que tomarnos un café y seguir.
El resto de personas, las conversaciones entre amigos, los abrazos, la confianza en los demás, poder estar con otras personas sin necesidad de nada más, es nuestro despertador, nuestro café, lo que nos hace seguir, y debemos aferrarnos a ello, no podemos vivir dormidos en nuestra nube en la que todo es perfecto, necesitamos despertar, porque dormidos estamos sonámbulos, somos marionetas, pero despiertos, despiertos somos nosotros mismos, despiertos somos mejores.
¡DEBEMOS DESPERTAR!

domingo, 8 de febrero de 2015

PUEBLOS

Un buen pueblo necesita aunque sea muy pequeño por lo menos dos plazas la de la iglesia o la del ayuntamiento y la mayor, mínimo un bar, un parque y una fuente con pilón, obligatorio que haya varios pueblos pequeños cerca a los que no se tarde más de media hora en ir, que tenga muchas cuestas y calles que sean caminos más que calles y que todo esté muy cerca, como mucho a cuarto de hora andando, lo que viene a ser diez minutos en bicicleta, también debe tener una iglesia, un ayuntamiento y un frontón;  no puede faltar el cementerio y una casa abandonada, además de muchas personas mayores,  gente de casi todas las edades  y más de una o dos viejas del visillo, las típicas abuelas que se enteran de todo, no está de más una peña cada dos pasos, unas buenas fiestas, la grande y la chica, con su música  por la noche, su concurso de disfraces, su pregón, su rondalla, su encierro, su torneo de brisca y de mus y por supuesto unos buenos invitados, que sarán los pueblos de alrededor,  no hay que olvidar que necesita una montaña muy cerca con La Cruz y algún que otro camino al bosque que pase por en medio del río. No es necesario que tenga ningún tipo de tienda, todo lo necesario lo traerán en furgonetas/tienda, ni piscina municipal, ya que cada vecino tiene la suya propia, ni necesita un centro joven, hay campo más que de sobra para jugar, tampoco hace falta un centro social, cualquier casa o peña cumplirá esta función si es necesario y sino la plaza o el ayuntamiento, no necesita ni centro médico, ni farmacia, solo necesitan que el médico vaya todos los martes y lleve los medicamentos, tampoco necesita mucha gente, pero todos los que haya tienen que ser familia de algún tipo. En las fiestas no hacen falta conciertos de nadie conocido. En un pueblo no hace falta que haya historias de miedo sobre alguien del mismo los propios niños del pueblo se las inventan.

Al pueblo se llega por la mañana, se deja la maleta y no se vuelve a casa hasta la hora de cenar, luego se sale otra vez hasta la una y se vuelve a casa a dormir, los días siguientes hasta la fiesta el horario es el siguiente: te despiertas a las once y media, desayunas, te cambias y a las doce bajas a la plaza a por el pan que traerán en una furgoneta,  después solo volverás a casa a la hora de comer y el día que toque ir a tu piscina esperas a que vengan el resto, si no, sales a buscar casa por casa a todos los de la peña, estarás en la piscina hasta la ocho y media que se va el ultimo rayo de sol y te secaras ya de noche y muriéndote de frio,  vas a cenar a las diez y media y a las once estarás en la plaza hasta la una y media y cuando estés en fiestas habrá días que ni pasaras por casa a comer, ni a dormir, incluso algún día solo entraras a cambiarte y a decir que sigues vivo.

Si no tienes pueblo seguramente te estarás preguntando qué haces todo el día por ahí.
Pues de todo desde intentar pescar en el río, cazar gatos, hacer colonia, investigar casa abandonadas y recorrer caminos extraños, eso sí  todo en la bici y por la tarde pues  piscina, piscina y más piscina por la noche desde jugar al pilla-pilla o a retroceso hasta contar historias de miedo.
Y lo mejor de los pueblos es que la gente es majísima, los amigos que haces son para toda la vida y son de verdad, son capaces de saltar al río para mojarse si te has caído o acompañarte a tu casa a la una de la mañana porque te da miedo ir solo y luego volverse solos,  sin los amigos el pueblo no sería nada más que cuantas casa de gente vieja y aburrida que se saben tu vida mejor que tú y el sito más aburrido del mundo donde pasas todos los veranos o el sito del que tanto habla tu abuelo y al que has ido dos o tres veces en tu vida.
Yo me he pasado todos los veranos de mi vida en Irueste, mi pueblo, y me alegro un montón de que sea así porque Irueste es un pueblo de verdad.

sábado, 7 de febrero de 2015

RUIDO

¿Qué es el ruido? ¿De dónde viene?
Yo odio el ruido, no me gusta, me aborrece, me da dolor de cabeza, me pone de mal humor. 
Ruido cinco letras, ERE.U.I.DE.O, cinco letras que tienen mucha fuerza, juntas forman una palabra, que según el diccionario significa:
1. sonido confuso y más o menos fuerte.
2. alboroto, túmulo o discordia.
Para mi el ruido es ese sonido molesto de los motores de coches y motos, ese sonido que hace la batidora, el lavavajillas o la lavadora, ese sonidito que hacen a tu alrededor cuando estudias ese sonido que al fin y al cabo MOLESTA.
El ruido lo usamos en las manifestaciones, para hacernos de notar, el ruido sirve para abuchear, ruido haces cuando gritas, cuando das golpes a las cosas, cuando arrastramos mesas y sillas, hay ruidos que nos sobresaltan y otros que los dejamos pasar, hay ruidos a los que nos acostumbramos y ruidos que solo notamos cuando hay silencio, porque los ruidos son fuertes y estridentes pero también hay ruidos suaves y casi imperceptibles, como el ruido de un boli al escribir o el ruido del viento, hay ruidos que molestan más que otros, e incluso hay ruidos que a algunas personas les gustan, pero el peor de todos los ruidos, el ruido que más daño hace, el ruido que más molesta, es el ruido de las palabras de enfado, el ruido de las palabras con malas intenciones, el ruido de las palabras de odio, el ruido de las palabras de desprecio.
Porque el ruido es muchas cosas y viene de muchos sitios pero la mejor forma de evitarlos, es intentar ver en cada ruido una canción, una melodía que nos alegre, hay veces que no se puede o que es muy difícil, como con el ruido de las palabras, cuando esto pase, cuando no podamos transformar el ruido, lo mejor es dejarlo pasar y no hacerle caso, alejarse de ese ruido... y sobretodo intentar no hacer ese tipo de ruidos nunca.